CUANDO LOURDES VISTE
Cuando Lourdes se viste de rojo
Parece un tomate flojo,
Cuando Lourdes se viste de blanco
Queda tan bonita como las nubes.
Cuando Lourdes se viste de amarillo
Se parece al limón y al sol
Y todos esos atuendos
Le llegan al corazón.
EL VESTIDO DE CARACOL
El vestido de caracol
Tiene caparazón de seda roja
Que le cubre su vestido
Cuando se sonroja.
Mi vestido de caracol
Sería de tela polar,
Como un osito cariñosito
De corazón súper grandecito.
MI CASA ALOCADA
Tengo una casa alocada
Donde los gatos toman chocolatada.
Tengo una casa alocada,
En el jardín está mi cama
Y cuando hace frío
Me tapo con un gallo.
Tengo una casa alocada
Con ventanas que llegan hasta el cielo
Y viajando a las estrellas me desvelo.
Tengo una casa alocada
Donde hay espejos con ojos de niño
Donde me reflejo siendo yo mismo.
Tengo una casa alocada,
Se escuchan risas, aplausos
Para que el cuco huya
De sus propios espantos.
Tengo una casa alocada
Y lindas abuelas
Que tejen maravillosos cuentos.
Tengo una casa alocada
Donde vivo con mis primos
Y jugamos a las cartas
Y a las cosquillas en la panza.
LA ROPA
Cuando Bianca se viste de rosa
Su cara se llena de dulzura hermosa
Que se sienta en el cielo su suave voz de trino
Que llama a los ángeles que la guardan en su camino
Cuando Bianca se viste de rosa
La hierba se llena de bellas mariposas.
¡Ay, mi niña! Tan Bianca, tan rosa
Eres de mi vida la esencia la prosa.
Cuando Bianca se viste de rosa
No hay dudas, ella es hermosa.
MI ENTORNO
Nací en una lejana ciudad abrazada
Por el frío y el viento quien
Sin poncho corre desnudo
Como un loco por los cerros lejanos,
Pero al irse nosotros nos inquietamos.
Mi tierra, tan llana, tan seca
Rodeada por el infinito mar.
Se iluminan sus ojos negros,
Cuando la camino
Y bajo mis pies se abren,
Llorando, como barro negro.
Te ven lejana, árida y descuidada,
Pero nosotros te vemos, blanca
Bella y anhelada,
Te cubrimos de niños, mates y empanadas.
Te amamos aunque otros te sientan muy lejana,
Por eso llevamos contigo, tus penas olvidadas.
EL ÁRBOL DIJO
Y árbol dijo llorando tristemente,
Dejen tranquilo a mi niño,
Que aún no ha nacido de mis pies heridos
Ya no siento sus latidos, es que ese ruido dañino
De aquél aserradero ha matado mis sentidos…
¡Ay! La madre tierra llora
Por sus desérticos caminos
Que el hombre ha dejado en su ciego destino,
¿Qué les pasa a los hombres que han perdido el sentido?
¿No se dan cuenta que al destruirnos,
Se lo están haciendo a ellos mismos?
Bianca Battista
12
años
Comentarios
Publicar un comentario